Mas locuras y lios entre los empleados del restaurante familiar Wagnaria, Takanashi sigue intentando ayudar a Inami a curar su androfobia, mientras nuevos personajes se pasaran por el resturante para volver todo aun mas patas arriba
Entretenida segunda entrega de las locuras de los empleados del Wagnaria, bastante convincente el desarrollo de este anime.
Por supuesto no falta el humor, que predomina en todos los capitulos, aunque no duda en ponerse sentimental en momentos puntuales, viendo enfados de varios personajes con otros.
Quizas la mayor evolucion es que se intuye ciertos intereses amorosos, si al final de la primera temporada se sabia que Inami se habia enamorado del esforzado Takanashi y que Sato bebia los vientos por la despistada Yachiyo, en esta nueva entrega se deja caer con ciertos detalles que Takanashi y Yachiyo estan empezando a fijarse en Inami y Sato como algo mas que un campañero de trabajo. No obstante los toques son limitados.
Esta pequeña evolucion ayuda a que la historia no parezca un calco de la primera temporada, dandole frescura y que no parezca tan lineal. Ademas nuevos personajes como la pareja de hermanos que formaban parte de la banda de la encargada, Kyoko y que conocen tambien a Yachiyo, le dan giros a las historias, aunque la hermana sea una pelma de campeonato que pone a prueba la paciencia que extrañamente aun le queda a Sato.
Pero no son estos los unicos nuevos, tambien esta chico que anda en busca de su hermana, que podria ser la gorrona de Yamada, a juzgar porque el apellido es el mismo y se parecen bastante fisicamente y que ademas se muestra muy interesado en Inami.
De todos modos la temporada acaba con la promesa de mas risas, confusiones y momentos emotivos, porque no dudo que habra una tercera entrega.
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